Para que Dios reine en el mundo, primero tiene que reinar en nuestro corazón y en nuestra vida. Y para que eso suceda, tenemos que encontrarnos con Él y dejar que nos llene de su amor, de su gracia y de su fuerza a través de los siete sacramentos. Los sacramentos son encuentros con Cristo. Cuando participamos en ellos, tenemos la seguridad de tener un encuentro con Dios y de recibir su gracia. Jesús se compromete a que ese encuentro sea real y eficaz. A Dios no siempre lo vas a poder sentir, pero siempre lo vas a poder tocar. De ahí que cuando necesite sanar mi corazón, iré a dejarme lavar por Dios en el sacramento de la penitencia; cuando necesite alimentar mi alma de amor, me dejaré nutrir por Jesucristo en la Eucaristía; y me dejaré tocar por Dios en los momentos más importantes de mi vida.  Este nuevo libro de la serie Se Buscan Rebeldes lo hemos titulado Tocar a Dios. Los sacramentos de la Iglesia hoy para manifestar la realidad sobrenatural que se produce en cada sacramento, por el cual, a través de un signo sensible, tocamos a Dios invisible y Él nos transmite su fuerza y su gracia para que podamos vivir plenamente nuestra fe cristiana. La fuerza que brota de los sacramentos es el mismo amor de Dios que brota de Cristo, que sigue vivo hoy en su Iglesia. Por eso, podríamos decir que los sacramentos son «Jesús hoy con nosotros».